
El tema del acoso y abuso sexual es algo de lo que se habla constantemente en el mundo. A pesar de esto y de las numerosas campañas para concientizar y prevenir este tipo de agresiones, parecen todavía no ser suficientes y nunca pueden tomarse demasiadas precauciones. Debido a esto, los organizadores del festival de Coachella lanzaron una nueva iniciativa que podrán en marcha para este año. El programa se llama “every one”, y lo explican de la siguiente manera en su sitio oficial:
“Estamos haciendo un esfuerzo e invitando a los asistentes a ser mejores cada vez. Estamos tomando medidas deliberadas para desarrollar una cultura en el festival que sea segura e incluyente para todos. Personas de cualquier identidad o expresión de género, sexo, orientación sexual, raza, religión, edad o capacidades, son bienvenidas en Coachella.
Junto con el código de conducta, Coachella NO tolerará ningún tipo de agresión o acoso, ya sea sexual, físico o verbal. Cualquiera que sea encontrado violando esta política será sujeto a ser retirado inmediatamente del lugar del festival, y las autoridades podrán ser notificadas. La pulsera del festival del agresor podrá ser revocada y no se hará ningún reembolso.”
Las medidas de “every one” parecen ser realmente necesarias tras varios reportes de incidentes ocurridos en las pasadas ediciones del festival. Una reportera de la revista Teen Vogue, Vera Papisova, escribió un artículo al respecto, y dijo lo siguiente: “Tan solo pasé diez horas en el festival, en las que vi numerosas presentaciones y entrevisté a los asistentes sobre sus experiencias con agresiones y acoso sexual […] Durante las diez horas que estuve reportando para esta historia, fue manoseada 22 veces.”
Los asistentes a Coachella podrán tener acceso a servicios de apoyo emocional y psicológico por parte de personal capacitado para atenderlos en algún momento de crisis. También habrá sanitarios para hombres, mujeres, y unos “all-gender” a los que podrán entrar todas las personas sin importar su género.