En una jornada donde la Ciudad de México vibraba con el espíritu de la diversidad y la celebración de la libertad, Mägo de Oz ofreció una velada mágica y cargada de energía el pasado 29 de junio en la Arena CDMX. El concierto formaba parte de su gira internacional “Feliz No Cumpleaños 2024”, y marcaba el regreso triunfal de la banda a Mèxico con su nuevo álbum «Alicia en el Metalverso».

Desde temprano, los alrededores de la Arena CDMX se llenaron de fanáticos vestidos con sombreros altos y atuendos inspirados en el mundo de Alicia de Lewis Carroll. Esa energia desenfrenada se sentia mientras se preparaban para ser transportados a un universo de fantasía y metal. A las 9:00 PM, las luces se apagaron y un grito ensordecedor de las 17,000 almas presentes marcó el inicio de la noche.

Las pantallas iluminaron el escenario con un mensaje de texto al estilo de WhatsApp: “Ya es hora de que cumplas tus sueños, sígueme y se harán realidad” despues de que TXSU se iluminara en su iconica bateria sosteniendo la bandera de Mèxico  a lo alto. Con esta promesa de ensueño, Mägo de Oz tomó el escenario, y Txus Di Fellatio, el carismático líder y baterista, levantó sus baquetas, dando inicio a la primera canción de la noche, «Alicia en el Metalverso».

Magia y Metal en el Corazón de México

El espectáculo comenzó con un despliegue de luces y una energía imparable. Siguiendo con “Luna Sangrienta” y “El Paseo de los Tristes”, la banda demostró por qué sigue siendo un pilar del folk metal. La sorpresa de la noche fue la aparición de Susan, una youtuber mexicana del rock , quien tomó el lugar de Txus en la batería durante “El Metalverso”. Este momento electrizó al público, que coreaba cada palabra y se dejaba llevar por la pasión desbordante del escenario, sin saber que esta noche se volveria un recuerdo inolvidable al supareja proponerle matrimonio en le escenario.

Entre la vibrante energía de los riffs de guitarra y la resonancia de los violines, Txus tomó un momento para compartir palabras de reflexión con los asistentes. Recordó a todos que la vida es fugaz y que debemos vivir cada instante como si fuera el último. Dedicó la emotiva “Por Si Un Día Te Pierdes” a su hija, arrancando lágrimas y ovaciones del público:

“Contigo, mi vida, siempre estaré aunque a tu lado no me puedas ver, aquí estaré”.

Uno de los momentos más poderosos de la noche fue la colaboración entre los cantantes Prudence y Xana Laveyo, quienes unieron sus voces en el impactante “Te Traeré el Horizonte Hasta Ti”. Esta fusión de culturas hispanohablantes resaltó la capacidad de la música para conectar almas, sin importar la distancia. Los fanáticos mexicanos se sintieron especialmente conmovidos cuando la banda los invitó a cantar el conocido pregón “Se compran colchones, refrigeradores, estufas…”, creando una conexión única entre el grupo y el público.

Mientras la noche avanzaba, la intensidad del concierto no cedía. La banda llevó a los fans al límite con clásicos como “Hasta Que El Cuerpo Aguante” y el himno atemporal “Molinos de Viento”, que fue coreado a pleno pulmón por todos los presentes. La emotiva interpretación de “La Llorona”, uniendo instrumentos de viento, violines y solos de guitarra, preparó el terreno para la apoteósica “Gaia”.

El clímax de la noche llegó con una celebración inclusiva. La banda izó la bandera del orgullo LGBTTTIQ+ mientras tocaban “Seremos Huracán”, en solidaridad con los derechos de la comunidad. Este acto fue uno de los momentos más emotivos del concierto, resonando profundamente con la audiencia y reforzando el mensaje de amor y aceptación.

Finalmente, tras casi dos horas de espectáculo, Mägo de Oz cerró la noche con una explosión de confeti y la inolvidable “Fiesta Pagana”. Este clásico, que ha acompañado a muchos a lo largo de sus vidas, fue el broche de oro para una velada que combinó sueños, magia y la potencia del metal.