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La nueva edición del Medusa Sunbeach Festivaltermina en desastre tras derrumbarse una parte del escenario principal en la noche del viernes. Las consecuencias son catastróficas: un joven de 22 años ha fallecido y decenas de asistentes han resultado heridos, algunos con pronóstico grave.

Accidente en el Medusa Sunbeach Festival

El Medusa Sunbeach Festival se celebraba en Cullera, Valencia, entre el 10 y el 15 de agosto. Las fuertes rachas de viento vividas en la noche del viernes provocaron destrozos en el recinto, y afectaron a la estructura del escenario. Se estima que el número de heridos asciende de 40 tras los fuertes golpes de viento y los destrozos que ocasionaron. A parte del escenario principal, también se vio afectada la zona de la entrada del festival. Entre los heridos, 3 han sufrido varios traumatismos, mientras que el resto padecen contusiones.

Ante esta situación caótica, el Centro de Coordinación de Emergencias ha activado un teléfono de atención especial para familiares y afectados por esta situación. El número en cuestión es 900 365 112, de acuerdo con el 112 GVA. En este teléfono, familiares de los asistentes podrán localizar a los posibles heridos tras el accidente. Todo sucedió en torno a las 4 de la madrugada del sábado, cuando se ha formado una tormenta de arena que afectó a los asistentes, que trataban de resguardarse de las fuertes rachas de viento. Con la intensidad del mismo, comenzaron a volar vallas y diversos objetos, así como el propio cartel de la entrada principal. Finalmente, la estructura del escenario se vio afectada y comenzaron a desprenderse partes del mismo. Además, también vivieron subidas abruptas de las temperaturas, pasando en muy poco tiempo de 29 grados a 38.

La organización se pronuncia

Después de este grave accidente, la organización del festival se ha pronunciado para ofrecer un comunicado en el que explica la situación y también comunican que se suspende temporalmente la actividad del evento por las circunstancias meteorológicas. En todo momento mantienen que fue un evento climatológico totalmente inesperado, y que su actuación fue rápida para evitar poner en peligro la seguridad de los asistentes y los trabajadores del festival. El Medusa Festival esperaba reunir a más de 320.000 personas hasta el domingo, y se consideraba uno de los mayores eventos musicales del país. Finalmente, termina en desastre una edición que podría ser uno de los festivales más multitudinarios del país.
El comunicado completo de la organización del Medusa Sunbeach es el que sigue: “Estamos completamente desolados y consternados ante lo sucedido la pasada madrugada. La dirección de Medusa Festival queremos expresar nuestras profundas y sinceras condolencias a los familiares y amigos afectados por las fatales consecuencias acaecidas anoche. Hace unas horas, la localidad de Cullera y otras aledañas se han visto sorprendidas por inclemencias meteorológicas excepcionales que causaron diversos daños en la infraestructura de nuestro recinto. Hacia las 4 de la madrigada, un inesperado y violento vendaval asoló ciertas zonas del festival obligando a esta dirección a tomar la decisión inmediata de desalojar el área de conciertos para garantizar la seguridad de los asistentes, trabajadores y artistas congregados en el Medusa Festival. Desgraciadamente, el fenómeno meteorológico de características devastadoras hizo que algunas estructuras provocaran los inesperados hechos. Todo nuestro apoyo y cariño para los afectados en estos momentos tan duros y tristes. Nuestros pensamientos están en todo momento con ellos, la dirección de Medusa Festival nos ponemos a su disposición en cuanto necesiten”.

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Universal Music Group reveló que las grabaciones originales, mejor conocidas como «master tapes«, de un gran número de artistas se destruyeron durante el incendio sucedido en Universal Studios Hollywood en el año de 2008. El suceso representa pérdidas sumamente importantes y tristes, ya que, los master tapes son las grabaciones multipista con la que se realizan reediciones y remasterizaciones. Por ello, es posible que no veamos nuevas ediciones de algunos de los álbumes más importantes de la música popular contemporánea.

Entre los artistas afectados se encuentran Nirvana, Sonic Youth, Beck, Elton John, Soundgarden, Sheryl Crow, R.E.M., Bryan Adams, Jimmy Eat World, Les Paul, Peter Frampton, Slayer, White Zombie, entre otros. La catástrofe le ha costado a Universal Music múltiples demandas de varios artistas, que exigían una valorización real de los daños. Esto debido a que inicialmente Universal Music aseguró que sólo uno de cada cinco de sus clientes se verían afectados por el incendio, cuando, en realidad, los daños eran mucho más graves.

No fue hasta que las demandas empezaron a llover que UMG tuvo que aceptar que los daños eran mucho más grandes de lo que se había dicho en su declaración inicial. Por ello, la situación para la productora es sumamente complicada, ya que en estos momentos debe hacer un recuento de los daños. Si bien algunas grabaciones se podrán recuperar a través de copias análogas y digitales, el accidente representa una pérdida enorme de material cultural, ya que son pérdidas irreparables.