«Ana Victoria Verdaguer» presenta «Un lugar en el cielo», el único tema inédito del disco, pero con un peso importante por lo que significa en este momento para la artista: amor a quien ya no está, mostrando un agradecimiento y la promesa fiel de cumplir sus propios sueños algún día, orgullosa de mostrar a su padre como pudo surcar el cielo gracias a sus méritos a lo aprendido y a su instinto creativo.
“A pesar de que me sigue acompañando el dolor de la pérdida, el tiempo me ha enseñado a manejarlo de una manera constructiva. Siempre le agradeceré a papá todo el amor que me dio, todos sus consejos y enseñanzas, todos sus abrazos y risas, así como su luz y confianza para escribir mi propia historia… de eso habla UN LUGAR EN EL CIELO, de promesas, del eco de su voz, del regalo que significa parecerme a él y que por él adquirí la seguridad para ser yo misma y mostrar mi esencia. Como dice esta canción, ´voy a volar sin miedo´, comprometida con mantener vigente la obra de mis padres y también con la ilusión de que la gente conozca más la mía; es una responsabilidad que llevo con gusto y cómo no hacerlo, si cada día descubro que hay algo de magia en todo lo que emprendemos, como si embonara a la perfección una pieza con la siguiente. Voy a cumplir todo lo que le prometí a mi padre, hasta el último aliento y hasta que haya precisamente un lugar en el cielo para mí, para encontrarme nuevamente con su espíritu, con su sonrisa franca y con sus brazos que, estoy segura, no han dejado de impulsarme”: ANA VICTORIA VERDAGUER.
Aunque mis ojos no te han vuelto a ver
estás aquí debajo de mi piel,
eternamente.
Y aunque me hace falta abrazarte
pesa más la huella que dejaste en mí,
imborrable.
En mí está el eco de tu voz
mi vida canta tu canción,
y en tu camino doy
mis propios pasos.
Voy a escribir mi historia
como lo hiciste tú,
me enseñaste a encender una estrella
con mi luz,
voy a volar muy alto
como te prometí,
hasta que haya un lugar en el cielo para mí.
Es un regalo parecerme a ti
pero es más grande que de ti aprendí,
a ser yo misma.
En mí está el eco de tu voz
mi vida canta tu canción,
y en tu camino doy
mis propios pasos.
Por eso voy a escribir mi historia
como lo hiciste tú,
me enseñaste a encender una estrella
con mi luz,
voy a volar muy alto
como te prometí
hasta que haya un lugar en el cielo para mí.
Voy a escribir mi historia
como lo hiciste tú,
me enseñaste a encender una estrella
con mi luz.
Voy a volar muy alto
como te prometí,
como tú voy a hacerlo sin miedo
porque tú me enseñaste que puedo,
hasta que haya un lugar en el cielo para mí.
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