
Marty Friedman, exguitarrista de Megadeth, explica en qué se parece tocar la guitarra a practicar relaciones sexuales
El exguitarrista de Megadeth, Marty Friedman, ha ofrecido varios consejos muy valiosos para guitarristas con un toque sensual.
En una entrevista , que dejó Megadeth en el año 2000 y desde entonces tiene una exitosa carrera como músico en Japón, ha comparado dominar la guitarra con convertirse en todo un experto en las artes amatorias. Y es que, según el hacha, practicar mucho solo no significa que te vayas a volver bueno en “lo de verdad”.
«Todo lo que siempre digo sobre esto puede relacionarse con el sexo de alguna manera«, dice Friedman antes de ofrecer algunos sabios consejos sobre las seis cuerdas. «Si practicas tú solo en casa, se te dará bien practicar en casa. Si sales y actúas de verdad [sobre el escenario], se te dará bien hacerlo de verdad».
En la charla, Friedman admite que lleva sin tocar la guitarra en casa “probablemente tres décadas”: «Estoy tocando la guitarra muchísimo, todo el tiempo: actuando, escribiendo, ensayando, grabando«, explica. Pero parece que nunca solo en casa, vaya suerte.
Después el hacha explica que lleva tocando su instrumento delante de gente desde adolescente, lo cual le ha ayudado mucho desarrollarse: «He tenido la gran suerte de tocar en directo desde los 14 ó 15 años, así que todo lo que he hecho desde entonces ha sido crear música e interpretarla, y a menudo tener que explicarla, ya sea en seminarios de guitarra o en vídeos musicales para cosas instructivas. Así que tengo que saber exactamente lo que hago«.
En sus memorias, ‘Dreaming Japanese’, Friedman desvela que, cuando dejó Megadeth, la gota que colmó el vaso fue un ataque de pánico que sufrió en la Navidad de 1999: «Me dolía demasiado como para pensar«, escribe. «Me caí del sofá y no podía moverme. El corazón se me aceleraba como un cocainómano a punto de sufrir un paro cardíaco, y las palpitaciones eran tan fuertes que me dolían los músculos del pecho. Joder, ¿podría ser un infarto?»
En 2015, también se le ofreció regresar a Megadeth, pero lo rechazó, básicamente, por dinero: “Si hubiera aceptado esa oferta, en una semana me habrían pagado menos de lo que ganaba en un día normal en Japón«, recuerda. «Me quedé atónito y enfadado, y les dije que no podía ni planteármelo. Hice una contraoferta, que era lo mínimo que podía aceptar, y mucho menos de lo que he recibido de cualquiera de los artistas con los que he girado por Japón».
Friedman se reunió finalmente con Megadeth, pero sólo por una noche, tocando dos canciones con la banda durante su concierto de 2023 en el Budokan de Tokio.