
Linkin Park comenzó su tan esperada gira en México, y como era de esperarse, la emoción entre los espectadores era palpable. Todos aguardaban ansiosos el inicio del concierto mientras el recinto se llenaba rápidamente. De pronto, el escenario se iluminó y apareció AFI, una legendaria banda que sorprendió a todos al ser el acto de apertura. Esta misma banda estará presentándose muy pronto en la Ciudad de México en un exclusivo evento privado en el House of Vans.
AFI deslumbró a la audiencia con una poderosa selección de sus éxitos, comenzando con ‘Girl’s Not Grey’ y ‘Love Like Winter’, que encendieron la energía del público. Continuaron con ‘End Transmission’ y ‘Beautiful Thieves’, seguido de ’17 Crimes’ y la intensa ‘I Hope You Suffer’. La nostalgia se apoderó de los asistentes cuando tocaron ‘The Days of the Phoenix’ y ‘Silver and Cold’, cerrando su actuación con la icónica ‘Miss Murder’, que dejó a todos eufóricos.
A pesar de que muchos fans expresaron su descontento por la limitada cantidad de cortesías para el próximo evento en House of Vans, el público recibió a AFI con los brazos abiertos, olvidando las quejas y entregándose por completo a una noche que prometía ser memorable.
Después de la actuación de AFI, el público se encontraba ansioso por ver a Emily, la nueva vocalista de Linkin Park, y descubrir cómo se desenvolvería frente a sus más grandes fans en México. Sin embargo, en cuanto comenzó la música, todos se dejaron llevar por el sonido y rápidamente se pusieron de pie, sumergiéndose en una atmósfera electrizante.
La noche comenzó con ‘Somewhere I Belong’, una canción que resonó con fuerza en el público, evocando recuerdos y emociones profundas. La energía de la audiencia creció aún más cuando sonaron los primeros acordes de ‘Crawling’, una de las canciones más icónicas de la banda, donde la voz de Emily se fusionó con la intensidad de la melodía, dejando a todos impresionados.
Con ‘New Divide’, acompañada de una introducción especial llamada ‘Moscow’, la multitud sintió una oleada de poder y nostalgia, mientras los visuales envolvían el escenario en un espectáculo hipnótico. Los visuales en las pantallas eran increíbles, sincronizados perfectamente con las luces que seguían el ritmo de la música, creando una experiencia inmersiva. Durante ‘The Emptiness Machine’, una canción más reciente que conectó con los fans por su potente mensaje, la banda recorrió la pasarela que cruzaba el escenario, interactuando de cerca con los asistentes.
En el segundo acto, ‘Creation Intro A’ comenzó con elementos de ‘Castle of Glass’, envolviendo a la audiencia en una atmósfera etérea, seguido por ‘The Catalyst’, una explosión de sonidos que hizo vibrar al público. ‘Burn It Down’ elevó la emoción aún más, y con ‘Over Each Other’, donde Emily sorprendió tocando la guitarra, el público quedó completamente cautivado. Emily tomó un momento especial al ponerse una bandera de México sobre los hombros, provocando una oleada de gritos y aplausos entre los fans, que se sintieron más conectados que nunca con la banda.
La energía continuó con ‘Waiting for the End’ y ‘Castle of Glass’, dos canciones que mantuvieron el equilibrio entre lo nostálgico y lo nuevo. Luego llegó ‘Two Faced’, una pieza intensa que mantuvo al público en éxtasis. Joe Hahn, acompañado por Colin en la batería, ofreció un solo impresionante que hizo vibrar a todo el recinto, mientras los visuales y luces seguían creando un espectáculo impresionante en ‘Empty Spaces’.
Mike Shinoda se adueñó del escenario con una poderosa interpretación de ‘When They Come for Me’, mezclada con ‘Remember the Name’, donde Colin siguió aportando fuerza con su batería. ‘Casualty’ fue una explosión de energía, y con ‘One Step Closer’, el público no pudo contener su emoción, saltando y coreando cada palabra.
El tercer acto continuó con ‘Break/Collapse’, una canción que canalizó una mezcla de furia y liberación emocional, seguida de ‘Lost’, en una versión completa que dejó a todos sin aliento. El debut en vivo de ‘Good Things Go’ fue uno de los momentos más especiales de la noche, mostrando la evolución de la banda y su nuevo sonido. Mientras Emily seguía recorriendo la pasarela con la bandera mexicana sobre sus hombros, los fans coreaban con una intensidad indescriptible.
‘What I’ve Done’ llevó al público a un clímax emocional, donde las luces y los visuales se unieron en una perfecta sinergia para crear un espectáculo visual impresionante. En el cuarto acto, ‘Kintsugi’ introdujo un ambiente introspectivo que se complementó con ‘Overflow’, otra canción que se tocaba por primera vez en vivo, sorprendiendo a los fans con su profundidad lírica. Cuando llegó ‘Numb’, con la introducción de ‘Numb/Encore’, el público estalló en euforia, coreando cada palabra como si fuera un himno.
‘In the End’ y ‘Faint’ mantuvieron la energía en su punto más alto, cerrando el set principal con una explosión de aplausos y gritos. El encore comenzó con ‘Resolution Intro A’, que incluía elementos de ‘Papercut’ y ‘Castle of Glass’, preparando el terreno para ‘Papercut’, una de las canciones más queridas por los fans. Con ‘A Place for My Head’, la banda llevó al público a un estado de catarsis, antes de cerrar la noche con ‘Heavy Is the Crown’ y ‘Bleed It Out’, dejando una huella imborrable en todos los presentes.
A lo largo del concierto, aunque muchos estaban ansiosos por escuchar a Emily y su interpretación de los éxitos de Linkin Park, la emoción de la música hizo que el público se entregara por completo, sin importar las expectativas previas.