
Félix Maldonado, director y productor del montaje teatral La fierecilla domada, de William Shakespeare. Con calidez y humor, Félix compartió cómo esta comedia clásica llegó a su vida hace más de 20 años, cuando estudió actuación en el Centro de Arte y Comedia Gonzalo Correa. Fue ahí donde inició su trayectoria, primero como alumno, luego como actor y ahora como director, heredando el legado teatral de su maestro.
El montaje actual de La fierecilla domada se presenta como un homenaje a esa formación y a la compañía original, integrando a exalumnos y actores profesionales bajo una disciplina rigurosa, pasión por el teatro y un fuerte sentido de compañerismo. Félix recalcó que el teatro clásico no es aburrido; al contrario, su atemporalidad lo mantiene vigente, y en esta obra se respeta el texto original con ligeros ajustes para un enfoque más empático y actual.
La historia gira en torno a dos hermanas: Blanca, dulce y pretendida por varios hombres, y Catalina, agresiva e indomable, cuya falta de pretendientes impide que la menor se case. El reto es encontrarle un esposo a la fierecilla, lo que desata una serie de enredos cómicos. Félix explicó que, aunque la obra toca temas polémicos, como la sumisión femenina, su montaje busca mostrar sin imponer, dejando al público la reflexión y el juicio.