El tercer álbum de Def Leppard llegaría a las tiendas de discos un 20 de enero de 1983, álbum que llevaba por nombre Pyromania… Y con él un cambio radical en la banda se iba acercando.
El debut de Phil Collen en la guitarra quien sustituiría a Pete Willis ya que había sido expulsado de la banda debido a sus problemas con el alcohol, tal vez este fue el primer cambio que se hizo más notorio en cuanto al sonido de la banda en el nuevo álbum.
High N’ Dry, su antecesor, había presentado a unos Leppard que podían sonar pesados sin ningún problema y como banda emblema dentro de la NWOBHM, sin embargo con Pyromania ese sonido se empezó a modificar.
Habriendo con Rock! Rock! (Til You Drop) que todavía intentaba seguir por la misma línea que sus trabajos anteriores, los jóvenes de aquella época podrían esperar un álbum igual de agresivo que High N’ Dry.
Sin embargo al comenzar el segundo tema, Photograph eso cambiaría ya que el riff inicial parecía ser sacado de algún álbum de Van Halen con un coro muy pegadizo que aligeraba el sonido, cosa que también se repetiría en Stagefright que si bien es un tema mucho más rápido y un riff más pesado que el del tema anterior, la pieza comenzaba a tener un aire «más americano».
Y es precisamente el cambio en este disco, «la americanización» que Def Leppard comenzaría a trabajar a partir de aquí, y dentro del álbum en sus temas posteriores, llegando a la épica Follin’, un tema que parecía querer retomar el sonido de aquella poderosísima balada llamada Bringin’ On The Heartbreak.
Los cortes finales (Rock Of Ages, Comin’ Under Fire, Action! No Words y Billy’s Got A Gun) intentaban seguir emulando el sonido heavy de los primeros dos álbumes de la banda.
Pyromania sin duda alguna es un gran álbum, cuyos sencillos lanzados tuvieron un gran éxito, sin embargo a partir de aquí, Def Leppard cambiaría totalmente su sonido y su imagen para entrar de lleno como una banda glam, una banda que si bien es británica, terminó por sonar y parecer una banda Norteamericana.