Mauricio Hernández González, mejor conocido como Aczino, volvió a escena, tomó el micrófono y, con su muy particular estilo, llenó de rap y rimas el escenario de Sala Estelar. Esto es lo que sucedió.
Esta ya no tan nueva modalidad de conciertos en streaming sigue siendo una experiencia distinta, a la que muchos no terminamos por acostumbrarnos. En esta ocasión, Aczino el responsable de llevarnos a otro estado mental.
Desde sus inicios, el rap ha sido uno de esos géneros que retratan la vida en las calles, desde la violencia, la inseguridad, los abusos de poder, etcétera, y es eso mismo lo que ha logrado crear un vínculo fuerte con los fans.
Los últimos años, en México, se ha vivido una importante escena del rap que continúa creciendo a pasos agigantados, gracias a propuestas y exponentes como el oriundo del Estado de México.
Dieron las ocho de la noche y, en punto, apareció en escena Aczino y ese estilo freestyle que ha logrado influenciar a una gran cantidad de jóvenes en distintas partes de la República.
Duró una hora, aproximadamente, lo suficiente para dejar huella y llenar cada espacio de rap, de rimas, de mucha energía, acompañado de algunos invitados especiales para la ocasión.
Sonaron fuerte y directo temas como “Mis Barras Te Borran”, “Rugal Flows”, “Tiempo Completo”, todos con la insignia y el olor de Aczino, que no paró ni un minuto y su presencia se notaba más en el escenario.
El momento para la improvisación llegó a la mitad del show con algunos invitados muy especiales, entre los que se encontraba, sí, el comediante Franco Escamilla y algunos exponentes fuertes del freestyle.
“Murciélago” y “Matar o Morir”, entre muchos más, le dieron a la noche calor, furia y agresividad, como no se había vivido anteriormente en la Sala Estelar.
Aczino dio muestras de lo que es, de su prestigio en un género que va ganando terreno y poder en la escena de la música actual. Un show corto, sí, pero más que suficiente para saber quién manda.
