
La Ciudad de México nos habla todo el tiempo y nos cuenta su propia historia, tanto en sus calles como en sus monumentos, en sus edificios, en sus vestigios prehispánicos, en los pueblos originarios que aún la habitan y en sus centros culturales. Sin embargo, existe un inmueble en el mero corazón de la capital que alberga los anales de la formación del ente complejo, dinámico y cambiante que es hoy en día nuestra metrópoli.
Se trata del Antiguo Palacio de Ayuntamiento, edificio mandado a construir a inicios del siglo XVI por el primer gobernante de la ciudad, Hernán Cortés. Desde entonces, ha cumplido funciones de gobierno, administrativas y ha sido testigo de los pasajes más importantes de la historia de la capital que han tenido lugar en la plaza mayor del país: el Zócalo. Abierto al público en 2019 por iniciativa de la hoy Presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, de la mano de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México, este espacio con 500 años de historia no solo se ha convertido en uno de los lugares favoritos de parejas de casados y quinceañeras para fotografiarse en su bella escalinata, también se ha consolidado como un importante complejo cultural que resguarda la memoria histórica de la ciudad a través de exposiciones permanentes y temporales en cinco espacios museísticos de entrada libre que están disponibles para ser explorados por locales y turistas.
Tan solo al entrar al inmueble, durante los primeros meses de este 2025, las y los visitantes podrán admirar en el Patio Poniente “Salvador Allende” la exposición «La Tira de la Peregrinación a 700 años de la fundación de la Ciudad de México», una muestra que nos introduce a este documento virreinal en el que se narra el origen de los aztecas, desde su salida de Aztlán hasta antes de la fundación de México-Tenochtitlan el 13 de marzo de 1325, cuyo recorrido es seguido por medio de huellas humanas y cuatro personajes que simbolizan a los calpullis en sitios emblemáticos como Chapultepec y Pantitlán, y cuenta con una decoración impresionante de estilo art nouveau mandada a hacer en el siglo XIX por los festejos del Centenario de la Independencia, con una obra de arte en el plafón autoría de Francisco Parra y un busto de Benito Juárez que data de 1872, así como cuatro cuadros de Tiburcio Sánchez que engalanan las paredes con los retratos de José María Morelos y Pavón, Miguel Hidalgo, Vicente Guerrero y Francisco Primo de Verdad, a quien por honor se bautizó esta Sala de Cabildos.
Y así, el Antiguo Palacio del Ayuntamiento, ubicado en Plaza de la Constitución 2, en el Centro Histórico, da fe de los 700 años de historia de nuestra Ciudad de México y sus puertas permanecen abiertas al público de manera gratuita, de martes a domingo, en horario de 11 a 17 horas.